Hidalgo, viajando al México minero
El pasear por el corredor de la montaña en el estado de Hidalgo es sin duda una experiencia única. Para los que no habíamos tenido la suerte de conocerlo y que residimos en la capital, el pasar por Hidalgo no representaba más que algunas visitas eventuales a la ciudad de Pachuca, que siempre tiene su encanto, o recorrer las nuevas autopistas que nos llevan de forma rápida desde la ciudad de México hasta Veracruz, entrando por lado de Papantla y hacia la costa Esmeralda. En esta ocasión, nuestro destino sería unos kilómetros al norte de “la bella airosa” hacia la llamada Sierra de Pachuca, y cuál sería nuestra sorpresa en adentrarnos a ese sendero que, como cuento fantástico, inicia con un pequeño túnel a la salida de la ciudad y va tomando forma de pendiente ascendente. En este punto el ecosistema cambia radicalmente pasando de ese paisaje llano y semiárido con el cuál creíamos identificar al estado, a un paisaje poblado de oyameles. Nuestro recorrido tenía como escala prin