Los Detectives Salvajes, de Roberto Bolaño. Un acercamiento personal.
Es curioso el fenómeno que existe entre nosotros los lectores o, quizá sea más propio decir, entre los que disfrutamos de obras culturales de diversos géneros. La mayor parte de nosotros empezamos explorando posibilidades, experimentando con obras de orígenes muy disímiles; pero al pasar de los años vamos adoptando nuestros favoritos, y dirigiendo todas las miradas hacia un grupo pequeño de autores, que convertimos en escritores de culto y viralizamos. Esta tendencia se ve claramente reflejada en las editoriales y en las librerías, donde observamos cada vez menos segmentos de los mismos autores. Al igual que nos hemos quitado de problemas comprando nuestra música en una sola tienda, comprando café en un solo expendio (sin importar lo caro que este sea), viendo siempre los mismos programas en la televisión y buscando incansablemente en las salas el género de películas que nos apasiona; ha ocurrido, tal vez en mayor medida en la literatura. Vemos que los amigos restringen su unive