Cascada de Tamul, Huasteca Potosina

Resulta muy interesante ver como un elemento como un simple bote repleto de gente, cambia completamente nuestra percepción del espacio y bien utilizado, puede agrandar la impresión de la misma en la mente del espectador.

Por inicios del mes de mayo de 2008, estando de gira por la Huasteca Potosina en el Municipio de Aquismón, también famoso por los recorridos al salto de las golondrinas y de las guaguas, una de las recomendaciones obligadas era la cascada de Tamul. Localizado en el cruce del Río Gallinas y el Santa María, es el salto de agua más grande de San Luis Potosí. 

La ruta en auto es de por sí, muy interesante. Se abandona la carretera a San Luis a la altura del ejido el Sauz, y de ahí se va manejando por unos mágicos caminos de terracería, de esos que parecen extraídos de los cuentos, entre campos verdes y árboles que invaden el camino con sus delicadas sombras. Y una vez que se llega al ejido de la Morena, nos tenemos que apear del auto y hacer unas desorganizadas filas hacia el área de lanchas, en donde conviven los viajeros espontáneos que llegan al sitio, con aquellos pseudo privilegiados que llegan en tour, conformando una especie de realeza que les da una súbita prioridad en el turno del paseo. En fin, no vale mucho la pena detenerse en ajetreado gallinero de esta zona, simplemente hay que ser pacientes y pensar que lo que sigue, bien  lo justifica. De este punto sigue más de una hora de remo para llegar primero a la famosa Cueva de Agua, una especie de cenote que se introduce en el cerro y en donde se permite el buceo, y posteriormente a la cascada.

Es en una roca que está perfectamente orientada hacia el costado de la cascada, que uno puede tomar esta postal, con el encuentro de las dos paredes a los costados del río, así como el tapiz rocoso del suelo. La fotografía seguramente es una de las más famosas de la región. Deben de haber miles de retratos individuales, de parejas y de grupos en este sitio. Pero lo que me gusta particularmente de esta foto, que salió de forma casi fortuita después de ver varias tomas en el sitio, fue el efecto profundo que denotan esos viajantes que se aproximan al salto. Por un lado, el bote da un referente de profundidad y por el otro, da una buena dimensión de la impresionante altura de la cascada que se ve al fondo.